lunes, 30 de julio de 2012
HOSPEDAJE DE PASO
"Nunca he conocido a los inquilinos de mi vida.
No he sabido cuándo salen, cuándo entran,
en que estación desconocida descansan sus miserias.
Las mujeres han salido de este cuerpo a los portazos
quejándose de mi tristeza,
en algunas temporadas se han quejado de humedad
de mucho frío, de algún extraño moho en la alacena.
Se marchan siempre sin pagar los inquilinos de mi vida
y el patio queda nuevamente solo.
Mi corazón deja de ser una posada de hambrientos
que acoge a todos los pájaros que llegan del verano
y que aguardan a que regreses por tus cosas
a este hotel de paso donde siempre es de noche.
(Federico Díaz-Granados)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario